sábado, 26 de enero de 2013

SI, TAMBIEN SOY UN ANTISISTEMA

     Si, yo también soy un antisistema a pesar que para el sistema soy un ciudadano modélico, tan perfectamente integrado que paso completamente desapercibido. Para el sistema no soy más que un número de los muchos millones que controla: no consto como conflictivo ni alborotador, no tengo antecedentes penales de ningún tipo, no debo ni me deben dinero, pago los impuestos que el sistema me obliga, nunca he hecho uso de la justicia, lo imprescindible y mínimo de la sanidad y nunca jamás he recibido ayudas o subvenciones del Estado, tampoco he pedido crédito alguno a la banca. Gracias a mi sentido de la responsabilidad, a la suerte y a mi esfuerzo personal cuido de mi mismo procurando no ser una carga para los demás.

     A pesar de que a mí personalmente no me va del todo mal, me siento solidario con los demás y  me cabrean los abusos de los ricos y poderosos, me indigna la hipocresía, mentira y falsedad de instituciones como el Gobierno, la Banca y la Iglesia, y lo que es peor, el abandono de la Justicia para con los más pobres y necesitados, que confiados en lo que ellos creían buenas intenciones y en el amparo del Gobierno, se ven ahora abandonados a su suerte en manos de banqueros y financieros sin escrúpulos que los engañan y estafan, y de una Iglesia que predica mansedumbre y resignación.

      Partidos políticos de izquierdas y sindicatos han sufrido una metamorfosis, han combertido la lucha común y el interés único de la clase trabajadora en una lucha intestina por el interés partidario, rompiendo en mil pedazos la unión de una clase social que ahora se ve al pairo, mientras las instituciones políticas y sindicales se han fundido en un sistema que solo funciona para una minoría muy poderosa e insolidaria.

      Esto lleva camino de ser como la ley de la selva, donde cada uno se buscará la vida como pueda; la ignorancia, la insolidaridad, el egoísmo y la hipocresia social nos lleva cara al abismo. El sistema está caduco y agonizante, yo reniego de este sistema... si yo también soy un antisistema.

1 comentario:

  1. Tal vez no seamos antisistema por convicción personal, aun cuando protestásemos y nos rebelásemos, en su momento, contra la injusticia y por una vida mas digna... Los magnates mangantes nos han obligado a serlo con su actitud corrupta y prepotente...
    Si, querido amigo, yo también soy un antisistema...
    Un saludo...
    Pantera Negra...

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