El Sr. Eme, el del punto, es un espécimen con unas características muy especiales. Aunque pretende camuflarse todos sabemos que es el máximo responsable de un partido político correa de trasmisión del franquismo, y acusado de organización criminal al servicio de personajes indecentes que para nuestra desgracia están conceptuados por la justicia, solo como presuntos delincuentes. El indecente, acusado en su momento por el jefe de la oposición como tal (ahora parece que ya no), es el jefe de organización, director general o presidente de todos y cada uno de los poderes del Estado a los que hay que reconocerle, maneja como gran maestro de ceremonias que es. Personajes de su más absoluta confianza copan los diversos puestos ejecutivos, sobresaliendo su habilidad para subyugar al poder judicial para ponerlo a su disposición y así enterrar mediante vericuetos que permiten la leyes, su corrupción que llevó a la ruina económica al menos a la mitad de la población.
Mientras tanto, ellos y sus incondionales se han enriquecido y se siguen enriqueciendo a cuenta de la sangre, sudor y lágrimas de muchos trabajadores y sus familias y uno se pregunta ¿como es posible que la bazofia inhumana que representa el del punto y toda la camarilla que le acompaña, acabe por sobrevivir politicamente en un país expoliado, donde las clases medias y trabajadoras han sido estafadas para el beneficio y lucro de la clase alta?
